sábado, 21 de agosto de 2010

El cuento de Caperucita Roja: el Lobo nos cuenta su versión

¡¡Hola a todas y todos!!

Hoy traigo una exclusiva fresca,fresquita, tanto es así que no paro de recibir llamadas de telecirco y sus payasos para quitármela, pero no, no me voy a vender por una panda como esa.

Hemos robado (sí,ya se que no suena bien, pero esto es lo que hay),la primera entrevista concebida por..¡¡el lobo!!Sí,sí, con el mismísimo lobo de el famoso cuento de los hermanos Grimm, aunque el primero en presentarnos la historia fue Charles Perrout en 1967.

En esta entrevista,el Lobo nos cuenta su versión sobre lo que realmente pasó, así que no me demoro más,en primicia mundial presentamos: La versión del Lobo.


- PERIODISTA: Cuenteme primero...¿como era el bosque?
- LOBO: El bosque era mi hogar. Yo vivía allí y me gustaba mucho. Siempre trataba de mantenerlo ordenado y limpio.


P - ¿Como conoció a Caperucita?
L - Era un día soleado,y mientras estaba recogiendo las basuras dejadas por unos turistas sentí pasos. Me escondí detrás de un árbol y vi venir una niña vestida en una forma muy divertida: toda de rojo y su cabeza cubierta, como si no quisieran que la viesen...lo cual también me hizo preocuparme un poco.

P - Bueno, igual fue idea de la madre...ya sabe como son...
L - Pudiera ser. El caso es que andaba feliz, y sin razón, comenzó a cortar las flores de nuestro bosque, sin pedir permiso a nadie además. Seguramente ni se le ocurrió que estas flores no le pertenecían, que forman parte del bosque, y están ahí para que las mariposas se posen en ellas.

P - ¿Y que hizo usted entonces?
L - Pues lo normal en estos casos, me puse a investigar. Le pregunte quién era, de dónde venía, a dónde iba...a lo que ella me contestó, cantando y bailando, que iba a casa de su abuelita,que esta enferma, con una cesta para el almuerzo.

P - Algo lógico el ir a cuidar a su abuela¿no?
L - Sí, claro que sí. Yo voy todas las semanas a ver a mis abuelos.De hecho me pareció una persona honesta, pero estaba en mi bosque cortando flores.Y luego además, de repente, sin ningún remordimiento, mató a un mosquito que volaba libremente por el bosque,que también es para él. Eso si, a veces son un incordio,pero son dificiles de matar. Alcanzan más velocidad que la velocidad de la luz, estás en tu cama con la luz apagada, lo oyes,zzuuzuzuzu en tu oreja, enciendes la luz y el mosquito no está. Pero volar libre por el bosque...¡arggg!eso no es razón suficiente para matarlo.

P - ¿Y que fue lo que hizo usted?
L - Decidí darle una lección y enseñarle lo serio que es meterse en el bosque sin anunciarse antes y comenzar a maltratar a sus habitantes.

P - Ya entiendo, ya. Trato de darle un par de consejos sobre la vida...
L - No, que va. La dejé seguir su camino y corrí a la casa de la abuelita. Cuando llegué me abrió la puerta una simpática viejecita,me invitó a galletas y chocolate,y traté de explicarle la situación.

P - ¿Y como lo vio la abuela?
L - Ella estuvo de acuerdo en que su nieta merecía una lección. La abuelita aceptó permanecer fuera de la vista hasta que yo la llamara y se escondió debajo de la cama.

P - Así que usted entonces espero a Caperucita a que llegara...
L - Eso es, mientras merendaba esperaba impaciente su llegada.

P - ¿Y que fue lo que ocurrió cuando llegó Caperucita?
L - Cuando llegó la niña la invite a entrar al dormitorio donde yo estaba acostado vestido con la ropa de la abuelita. La niña llegó sonrojada, y me dijo algo desagradable acerca de mis grandes orejas.

P - ¿Le insulto?
L - Sí. Aunque he sido insultado antes, así que traté de ser amable y le dije que mis grandes orejas eran para oírla mejor. Me agradaba la niña y traté de prestarle atención, pero ella hizo otra observación insultante acerca de mis ojos saltones.

P - Ahí fue cuando usted se puso furioso y trato de comersela...
L - ¡¡NO!!¿Lo ve usted?todo el mundo piensa que eso es lo que paso, pero no fue así...

P - Lo siento, no quería ofenderle...
L -No se preocupe, por desgracia estoy acostumbrado a ello.

P - ¿Y que hizo entonces?
L - Comprendame usted, pero es logico que me sintiera enojado. La niña tenía bonita apariencia pero empezaba a serme antipática...¡enena cara mosquita muerta, era una mal educada e indiscreta!...Sin embargo pensé que debía poner la otra mejilla y le dije que mis ojos me ayudaban para verla mejor.

P - Lo entiendo...todos somos human...quiero decir, que todos tenemos sentimientos.
L - Sí, y fue por eso que su siguiente insulto sí me encolerizo. Siempre he tenido problemas con mis grandes y feos dientes y esa niña hizo un comentario realmente grosero. Se que debí haberme controlado pero salté de la cama y le gruñí, enseñándole toda mi dentadura y diciéndole que eran así de grandes para comerla mejor.

P - Y claro, usted entonces no pudo evitarlo...¡y se la comió!...
L - ¡¡No,no,no y no!!piense un poco. Ningún lobo puede comerse a una niña. Todo el mundo lo sabe. Pero esa niña empezó a correr por toda la habitación gritando y yo corría detrás de ella tratando de calmarla.

P - ¿Que es lo que hizo usted entonces?
L - Como tenía puesta la ropa de la abuelita y me molestaba para correr, me la quité pero fue mucho peor. La niña gritó aun más.De repente la puerta se abrió y apareció un leñador con un hacha enorme y afilada.

P - E imagino que usted trató de escapar.
L - Por supuesto. Miré al leñador, con esos ojos que se le salían de su órbita, y comprendí que corría peligro... así que salté por la ventana y escapé. Me gustaría decirle que este es el final del cuento, pero desgraciadamente no es así.

P - ¿Que fue lo que pasó?¿Porque nunca hemos podido saber su versión?
L - La maruja y vieja de la abuelita jamás contó mi parte de la historia y no pasó mucho tiempo sin que se corriera la voz que yo era un lobo malo y peligroso.

P - Y nunca ha podido contarla hasta ahora...
L - Todo el mundo comenzó a evitarme. Incluso me encerraron en el bosque para que no pudiera comerme a nadie, pero he logrado escaparme. No se que le pasaría a esa niña antipática y vestida en forma tan rara, pero si les puedo decir que yo nunca pude contar mi versión. Ahora Ustedes, gracias a esta entrevista, ya la saben.

Y esto es todo. La versión de lo ocurrido con Caperucita Roja y su abuela, contada en primera persona y en exclusiva mundial por su otro protragonista, el Lobo.

Os dejo, que tengo el móvil echando humo con un montón de llamadas de todas las garrapatas del periodismo del corazón ofreciendome dinero por esta versión...y bueno, según dice el Lobo, se está preparando un especial en la tele sobre su historia...y también se rumorea de que Caperucita  y su abuela podrían estar negociando con telecirco para contar su versión...

viernes, 6 de agosto de 2010

Verdaderos genios arquitectónicos

Hoy os vamos a mostrar a verdaderos genios de las obras. Algunas obras arquitectónicas del futuro, fenómenos de la carretera con un ingenio mucho mejor que cualquiera de nosotros además de una imaginación fuera de nuestras posibilidades, porque para hacer todo este tipo de cosas...

1.- Barreras arquitectónicas

-Paso de peatones descentré. Foto tomada en León. Algo no me cuadra. O rebajaron el bordillo donde no debían, o pintaron el paso de peatones en el sitio inadecuado.

Ainnnsss, esto de repartir en subcontratas cada parte de la obra...



-Se acabó lo que se daba. Foto tomada en Asturias. Por lo que se ve tomaron la carretera con ganas, pero se les debió de acabar el presupuesto...


-Soluciones de inaccesibilidad. He aquí una obra de ingeniería. Acaban de inventar la inaccesibilidad. Para los peatones por la valla que les han colocado. A los vehículos por esa atrocidad que dan en llamar reductor de velocidad.

Hay que ser atleta para cruzar por allí. Igual es que cerca hay un polideportivo...

-Respeten los vados. ¡¡Me cago en la ****!! No me aparquéis delante que luego no puedo meter en el garaje la bicicleta... Mira que llamo a la grúa, ¿eh?...



2.- Carriles bici

Ahora todos los ayuntamientos se están apuntando a la moda del Carril-Bici. Queda muy progre y ecológico, pero los genios urbanísticos alegran la vida al ciclista con imaginativas variantes:

- Modelo Bilbaíno. Te plantan una pared en medio.

Como en el chiste, aparece Patxi con la cabeza vendada:

- Coño, Patxi, ¿qué te ha pasado?
- Nada, ¿ves aquel letrero de 'Se traspasa' en medio del carril-bici?. Pues no se traspasa, oyes

- Transporte combinado Bici-Bus: visto en la Expo de Zaragoza. Cuando te canses tomas el bus y tan a gustito, alámáñópuéeees!


-Modelo Emociones fuertes. Es que si no ir en bici se hace muy aburrido. Y encima te da la sombra...


3.- El Señalizador Borracho ataca de nuevo

Ya sabemos que está muy mal beber en horas de trabajo, luego pasa lo que pasa, que se inventan nuevas señales.

- Prohibido girar a la izquierda marcha atrás. O algo así debe significar este desaguisado...


- Dirección patobligatoria. Dios, ni los patos se libran de la voracidad señalizadora...



- Afán recaudatorio. Luego ponen un radar y se forran con las sanciones. Ya se están pasando...


- Lo dudoooo. Como la canción de Los panchos. Sacando media estadística la limitación debe ser de 55 km/h.



4.- Imaginación al poder

Hay quien tiene un cerebro dentro de la cabeza (si, parece increíble con los tiempos que corren)

- Nuevos radares. Visto que estamos en crisis, alguien ha mandado desarrollar un nuevo modelo de radar al departamento de I+D+I de la DGT. La solución, además de obvia, es sorprendente...


- Vacío legal. Anda que no es listo el notas del Smart. Eso es aprovechar el código de circulación, y lo demás son tonterías. Para decir al Poli Municipal 'Anda, múltame, anda'


5.- Por si no te enteras

Apartado dedicado al tesón mostrado por estos genios, sabedores de nuestra falibilidad. Quieren que no nos quede ninguna duda... o es que las señales estaban de oferta.

- Que está prohibido, coño. Más claro el agua. Si te pillan, digo que te caerán tres multas, ¿no?


-Todos los caminos llevan a... ORENSE/MONFORTE . Que digo yo, para eso sobra el GPS... Y las señales, ya de paso...


- Primer premio: ¡¡Freeeeeeeeenaaaaaaa!!. Foto tomada en Faro Sabinar (Almería). Desde luego, si te das la piña es para que hasta el seguro te quite la cobertura, por imbécil.